"Anuncia el Evangelio. Y en caso de necesidad, dilo con tus palabras."

San Francisco de Asís, el cual murió casi hace 800 años, dijo estas palabras. Pero nosotras no podemos decirlo mejor! Ahora bien, si podemos vivirlo. Más sin embargo, justamente quisieramos vivirlo: anunciar el Evangelio sin usar muchas palabras, simplemente por medio de nuestra existencia, de nuestro modo de ser, de nuestro ser consagrado, sin signos externos, en medio del mundo. Naturalmente, de vez en cuando es necesario usar las palabras, para contar de nuestra vida, de nuestra vocación, y del Dios, de quien recibimos la llamada.
Con motivo del "Año de la vida consagrada" en 2015, proclamado por el Papa Francisco, hemos puesto cada mes en las páginas de nuestra Web, el testimonio de diferentes miembros de nuestra comunidad. Cada una cuenta en forma muy personal, sobre su vocación y su camino dentro del Instituto San Bonifacio. De esta manera, se formó un retrato con variedad de colores, a través de todas las edades, nacionalidades y lugares de trabajo de los miembros del Instituto; algunos textos están también en español.
Eso sí: no es absolutamente necesario ... ¡pero también nos gusta usar palabras!

Testimonios de vida de miembros del Instituto San Bonifacio

Candy Johana L.

Mi nombre es Candy Johana L., nací en el año 1,991 en la aldea Las Marías, del departamento de Jalapa, ciudad de Guatemala. Nací en una familia muy pobre, ocupo el 2º. lugar entre 7 hermanos, mi vida fue marcada por el abandono de papá, por la misma razón solo pude cursar el 6º. Primaria.  A los 12 años ya trabajaba para colaborar en la economía …

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Mercedes C., (*1972), educadora social

Inicios en una historia de amor...

A veces, cuando leemos historias de vida de santos o biografías de personas importantes, esperamos encontrar algo sorprendente que les hace diferente a nosotros y tal vez, a quienes desearíamos imitar o alcanzar la meta que ellos alcanzaron. Así que, cuando ustedes sigan leyendo la historia sobre mi vocación, …

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